La AP Big Band toca las canciones de Radiohead como nunca imaginaste

Publica un disco en el que reinterpreta diez temas de la banda de Oxford en clave de jazz y con pinceladas de hip hop, con la colaboración del trompetista cubano Jorge Vistel, de cantantes como Pucho y Sheila Blanco y del MC argentino Roy Mercurio


Una de las novedades discográficas más destacadas de final de año es la publicación, el pasado 6 de noviembre, del disco ‘AP Big Band plays Radiohead’, o lo que es lo mismo, las canciones de la banda de Oxford pasadas por el filtro del jazz y del hip hop con un resultado tan sorprendente como satisfactorio para los fans de los británicos.

Se trata de un proyecto de varios años de la AP Big Band, una formación de Madrid con casi 20 músicos que tiene su origen hace más de una década en un proyecto educativo del saxofonista norteamericano Bobby Martínez y que en los últimos años, de la mano de Aarón Pozón, quien le da su actual nombre, se ha consolidado como una de las más importantes del panorama nacional. El trabajo finalmente ha podido ver la luz, no sin dificultades (al no ser temas originales, es más complicado que una compañía discográfica pueda sacarles rédito), a través del sello Youkali Music, gracias a la inyección económica de un ‘crowdfunding’, con el que recaudaron más de 4.500 euros, y las giras y grabaciones con artistas como Bertín Osborne, cuando estaba en plena efervescencia por su programa televisivo, y Javier Botella, que supusieron una importante fuente de ingresos para reinvertir en el disco, aparte de conciertos autoproducidos, uno de ellos en la mítica sala Joy Eslava.

 
 

La razón de ser del proyecto era volver a escuchar a Radiohead como si fuera la primera vez, mediante unos arreglos que adaptan los temas de los de Oxford al lenguaje jazzístico y que potencian lo mejor de su etapa post-‘OK Computer’, para lo que han contado con colaboradores de lujo, como Pucho, cantante de Vetusta Morla; Sheila Blanco, que para quien no la conociera se hizo muy popular durante el confinamiento gracias a su iniciativa de cantar la biografía de compositores clásicos como Beethoven, Mozart, Chopin (con James Rhodes), Wagner y Brahms; el MC argentino afincado en Madrid Roy Mercurio y el trompetista cubano Jorge Vistel.

El gran artífice del proyecto y director de la big band es Aarón Pozón, un saxofonista barcelonés con estudios en Nueva York que ha recibido clases de primeros espadas como Walt Weiskopf, Ron Horton, Dave Allen, Bobby Martínez, Chris Kase, Bill Evans, Robert Glasper, Jerry Bergonzy y Kirk McDonald, quien asegura que la elección de Radiohead, en lugar de cualquier otra banda moderna, para el disco se debe a que siempre ha estado «muy presente» en la música de su MP3 o del móvil, a pesar de que, por su profesión, se haya centrado en escuchar a saxofonistas y el jazz instrumental de Charlie Parker o John Coltrane, porque es una banda cuya música «ha trascendido», al igual que sucedió con The Beatles o con figuras como Miles Davis, que tenían la idea siempre de ir hacia delante y no repetirse.

 

La idea que tenía en mente Aarón Pozón era que la AP Big Band no se limitara a tocar los clásicos del swing de los años 30 o del jazz, sino darle una sonoridad nueva y actual

 

«Más allá del estilo, de estar tocando unos acordes o unos solos o de dar espacio para la improvisación, el jazz también forma parte de una actitud, la de no conformarse y tirar para adelante, aunque se pierdan fans por el camino, y Radiohead, por todo lo que ha hecho, encajaba perfectamente», detalla.

Además, se trata de un género que no es desconocido para la banda de Oxford, que figura como una de sus influencias y que en su amplio repertorio ha coqueteado con él en canciones como ‘Life in a glass house’, que parece sacada directamente de un funeral a ritmo de jazz en Nueva Orleans, ‘Pyramid song’ (la maravillosa batería), ‘We suck young blood’ (ese piano acelerado de la parte central), ‘National anthem (esos metales inspirados en el músico Charles Mingus), ‘The amazing sounds of orgy’, ‘Bloom’ y ‘You and whose army?’. Igualmente, su música sido previamente versionada por artistas del jazz como el pianista Brad Mehldau (‘Paranoid android’, ‘Exit music’, ‘Jigsaw falling into place’ y ‘Knives out’), el saxofonista Chris Potter (‘Morning bell’) y el trío The Bad Plus (‘Karma police’).

 
 

Pero la gran novedad es combinar la música de Radiohead con el concepto de big band, es decir, algo así como una pequeña orquesta de jazz, puesto que lo más común, o lo estandarizado, por así decirlo, suele ser que los grupos de rock opten por compartir escenario o grabar discos con orquestas sinfónicas o filarmónicas, como han hecho Metallica, Kiss, Deep Purple, Scorpions y, a nivel nacional, Sôber. La idea que tenía en mente Pozón era que la AP Big Band no se limitara a tocar los clásicos del swing de los años 30 o del jazz, sino darle una sonoridad nueva y mezclarla en una coctelera con la música que más le gusta, para intentar grabar algo contemporáneo, sin dar la espalda a la escena actual, lo que ha hecho que incorpore elementos de electrónica y de hip hop, que quizás puedan levantar ampollas entre los más puristas (¡Si Radiohead no hace rap!).

Y todo ello a través de unos arreglos que no son simples recreaciones de las canciones, sino que a veces se «desvían» de la senda marcada y transcurren por «caminos paralelos», donde no faltan los solos e improvisaciones características del jazz. «Es nuestra visión de Radiohead. Queríamos hacer algo que trascendiese estilísticamente», insiste.

Además, Pozón destaca que la banda de Oxford ha sido capaz de que personas sin conocimientos musicales canten compases de 13/8 o 7/4, «porque si no los llevas bien, no son nada ‘mainstream’ y no sonarían en la radio, pero ellos lo han conseguido. Nunca pierden el concepto principal, que es hacer música, aunque sin dejar de ser complejos». Por eso, avisa de que para escuchar el disco «hay que tener el pabellón auditivo bien abierto y estar dispuesto a dejarse sorprender por la propuesta».


Radiohead es la banda que más me gusta y a la que más veces he visto en directo, así que ha sido un sueño colaborar en un proyecto de estas características
— Sheila Blanco

Una de las mayores curiosidades es la selección de los temas, al no incluir los más evidentes y centrarse en los trabajos a partir del año 2000. De hecho, tan solo ‘Daydreaming’ ha sido publicado como ‘single’ y tiene videoclip. Y aunque no faltan clásicos de los directos como ‘Everything in its right place’ y ‘Exit music (for a film)’, también hay rarezas como ‘Packt like sardines in a crushed tin box’ y ‘Fitter happier’, que sirve como introducción, así como un pequeño homenaje a Thom Yorke con la incorporación, por sorpresa y en los minutos finales del disco, de su tema ‘Suspirium’, de la banda sonora de ‘Suspiria’.

«Tenía como premisa no incluir ‘Creep’, por el mero hecho de que ya hay muchas versiones, ni tampoco ‘Paranoid android’, aunque esta sí que la tocamos en directo, ni cosas así. A la hora de los arreglos, era más sencillo centrarse en los últimos discos, en los que la banda ha jugado más con las texturas y los colores, a través de la electrónica o las ondas Martenot, que no en los primeros, que eran más guitarreros y apegados al grunge y al rock alternativo británico y, por tanto, difíciles de trasladar al concepto de big band», argumenta.

En cuanto a la elección de los cantantes, reconoce que Pucho siempre fue la primera persona en la que pensó, porque tenía clarísimo que «Vetusta Morla bebía mucho de Radiohead» y era una buena oportunidad de unir dos mundos, el indie y el jazz. Así que tras varios intentos infructuosos para que cantara en directo algunos de los temas, por motivos de agenda del vocalista, finalmente consiguió que en junio del año pasado se metiera en el estudio con ellos para participar en dos de las canciones, ‘Daydreaming’ y ‘Weird fishes’.

 
 

Y es que el proceso de grabación se dividió en dos partes en PKO Studios, con el ingeniero de sonido Caco Refojo (ganador de cuatro Latin Grammy y con numerosas nominaciones). Una primera en la que se dejó hecha casi al completo la parte instrumental, más la aportación de Pucho, y el resto de voces más el solo de trompeta de Jorge Vistel para ‘Reckoner’ en una segunda sesión el pasado mes de septiembre. «Estuve sin escuchar el material desde que se grabó en junio y tenía dudas, porque no quedé del todo satisfecho, pero cuando volvimos al estudio me di cuenta de que sonaba espectacular. Ese parón hasta nos ayudó», opina.

En el disco también participa Sheila Blanco, que cuenta con un gran bagaje como solista de jazz y en las formaciones Puro Gershwin y Federico Tango Jazz 4tet y de la que Pozón destaca que también es una friki de Radiohead. Su elección se debe que la había escuchado interpretar una versión de ‘Morning bell’ al piano, por lo que decidió que nadie mejor para cantarla en el disco que ella. «Es un talento brutal. Fue fácil convencerla. Creo que hubiera cantado el disco entero de habérselo pedido», bromea.

Y ella lo corrobora. «Soy admiradora y seguidora de Radiohead desde sus comienzos. Es la banda que más me gusta y a la que más veces he visto en directo. Así que cuando Aarón me llamó para, primero, cantar en directo y después para grabar un temazo como ‘Morning Bell’ en el disco, pues me sentí muy feliz. Ha sido un sueño poder colaborar en algo así, con los grandes músicos de la AP Big Band». Sobre el resultado final, asegura que el álbum es «magnífico» y considera todo un lujo que exista un proyecto de estas características en España, en el que se homenajea a «una de las mejores bandas de todos los tiempos».


Cuando me dijeron que querían que metiera rap en unos temas instrumentales creados por una big band versionando a Radiohead, me pareció una puta locura
— Roy Mercurio

La parte de hip hop corre a cargo del argentino Roy Mercurio, MC de grupos como La Zurda y el colectivo Dremen y previamente conocido por el ‘alter ego’ de L.E.Flaco, quien es el autor de las rimas y el encargado de rapearlas. «Quería que escribiera algo ligado a las canciones, porque Radiohead es una banda en la que las letras son tan importantes como la música, tratando temas duros para las personas como la ansiedad o la depresión y haciendo críticas a la sociedad, siempre con carácter reivindicativo. No quería que se quedara esa parte desierta y el hip hop era el hilo conductor perfecto para hacerlo, en lugar de solo a través de cantantes», explica Pozón.

Aunque lo cierto es que Roy Mercurio no lo tenía al principio nada claro: «Cuando Aarón me dijo que quería que metiera rap en unos temas instrumentales creados por una big band versionando a Radiohead, me pareció una puta locura. Pero a medida que fuimos haciéndolo, fui entendiendo que lo que quería era que yo, desde una disciplina alejada de lo que son las canciones de Radiohead, me encontrase con ellas a través de la profundidad lírica, del juego metafórico y los mensajes que contienen. Y que aportase esa fibra sensible que se toca a través de las letras, fusionándome con ese espectro musical que han ido creando a través de la big band».

Así que, a pesar de las dudas iniciales, cree que el resultado de todo son unas cancionesunos temas, concretamente ‘Exit music (for a film)’, ‘Weird fishes’ y ‘Everything in its right place’, en las que te encuentras con un rap y en las que parece que tenía todo el sentido del mundo cuando las escuchas. «Para mí componer esas letras dejándome atrapar por las canciones ha sido una experiencia única», reconoce.

También cabe destacar la aportación musical del trompetista Jorge Vistel, que se luce en la versión de ‘Reckoner’, uno de los temas en los que más brillan las trompetas y en el que encajaba a la perfección su solo, que ya ha interpretado en conciertos como el que la big band ofreció en la sala Joy Eslava en 2017.

 
 

Y de cara al futuro, lo que realmente desea la AP Big Band es presentar el disco en directo cuando las restricciones así lo permitan y, a ser posible, en algún festival. «Creo que es algo que podría encajar perfectamente en el Dcode o el Mad Cool en un escenario por la tarde», propone. Y no va desencaminado, aunque obviamente conlleva más dificultades técnicas que una banda al uso, pero si Coachella fue capaz de poner a tocar al compositor Hans Zimmer con toda una orquesta en el desierto californiano, no parece descabellado que una big band suene en un festival indie, más aún si son canciones de Radiohead y cuenta con colaboraciones de lujo como las de Pucho y Sheila Blanco. Y como mensaje a las instituciones, que «abran los ojos y apoyen este tipo de proyectos, hechos por músicos con mucho talento formados en escuelas y conservatorios de España».

Estos son los músicos artífices del disco:

Viento madera (Saxos, flautas y clarinetes)

•          Aarón Pozón (Dirección)

•          Roberto Nieva

•          Ernesto Millán (Lead)

•          Jordi Ballarín

•          Marino Garcimartín

Trompetas y fliscornos

•          Javier Martínez

•          Raúl Gil (Lead)

•          Luis Soler

•          Tony Molina

Trombones

•          Roberto Lorenzo Elekes

•          Fran Sánchez (Lead)                         

•          Marcos Crespo

•          Guillermo Báez

Sección rítmica

•          Alejandro Mateos (Piano)

•          Marco Niemietz (Bajo)

•          Omar Alcaide (guitarra)

•          Miguel Lamas (batería)

Arreglistas

•          Alejandro Mateos

•          Ernesto Millán

•          Aarón Pozón

•          Ricky Padilla

•          James Miley