17 ‘samples’ que convirtieron canciones en éxitos

‘Apolo y sus musas’, pintura original de Maarten Van Heemskerck, aunque con añadidos modernos.

‘Apolo y sus musas’, pintura original de Maarten Van Heemskerck, aunque con añadidos modernos.

Cuando las musas no aparecen, hay que buscarlas… en discos antiguos, spaghetti westerns, películas de Bollywood o incluso teclados ochenteros; algo que hacen como nadie Daft Punk, Eminem, Beck, The Chemical Brothers, Gorillaz, The Prodigy, Jay-Z, Gnarls Barkley, Beyoncé y Fatboy Slim para ‘fabricar’ números uno en las listas de ventas


Existen muchas canciones que engañaron a nuestros oídos. Pensábamos que eran algo novedoso, porque tenían un efecto original, un riff de guitarra acojonante o un estribillo pegadizo, pero resulta que todo eso ya había sonado hace décadas. Pero si las musas no se te aparecen, hay que salir a buscarlas. Porque muchos productores no pasarán a la historia por sus dotes compositivas, pero sí por saber coger un pequeño fragmento, un ‘sample’ (normalmente apenas unos segundos), de una canción antigua (generalmente de los años 60 y 70) y darle una nueva vida creando un ‘collage’ sonoro que, en la mayoría de las ocasiones, supera el éxito de la original, y en cualquier estilo, aunque se trate de una técnica que se ha empleado fundamentalmente en el hip hop.

A veces son riffs muy conocidos, como puede ser el mítico de ‘Need you tonight’ de los australianos INXS, adaptado a los tiempos modernos en ‘Break my heart’, de Dua Lipa, uno de los ejemplos más recientes, pero también hay melodías y ritmos que solo por el hecho de imaginar que podrían ser el alma de una canción comercial que, incluso, ha alcanzado el número uno, bien merece un premio.

Aunque, si bien la frase célebre de Charles Caleb Colton dice que «la imitación es la forma más sincera de halago», cuando no hay reconocimiento explícito, eso se llama plagio, y también hay algunos ejemplos de grupos que tuvieron que pasar por los tribunales por los derechos y créditos de los temas. Así que repasamos 17 ejemplos de ‘samples’ que son fundamentales para el éxito de las canciones en los que aparecen y sin los que, probablemente, no hubiéramos escuchado al autor original intencionadamente en la vida.  

Portishead - Glory box (1994)       

 
 

Sample: ‘Ike’s Rap II’, de Isaac Hayes (1971)

El corazón de ‘Glory box’, la mejor canción de ‘Dummy’, el sobresaliente álbum con el que debutó la banda de trip-hop británica Portishead, es el delicado ‘sample’, tanto el sonido de los violines que parece sacado de una película de James Bond, como la parte rítmica que desprende sensualidad por todos los poros, tomado del tema ‘Ike's rap II’, del cantante de soul ya fallecido Isaac Hayes (famoso también por ponerle voz a Chef en ‘South Park’), y que se repite hasta el final, aparte de esa forma en la que Beth Gibbons cantaba «Give me a reason to love you / Give me a reason to be a woman».

 
 

Una canción que catapultó el éxito de la banda que, sin embargo, la consideraba demasiado comercial para sacarla como ‘single’. Por suerte, su compañía discográfica no les hizo caso. Lo curioso es que otro artista icónico del trip-hop, Tricky, usó el mismo ‘sample’ en su canción ‘Hell is round the corner’, que salió publicada solo unos meses después. Y como no hay dos sin tres, Alessia Cara también lo incluyó en su tema ‘Here’, ya en 2015. Aunque la de Portishead es la mejor versión de todas.

 
 
 
 

Perdón, quería decir cuatro versiones. Snoh Aalegra y Vince Staples, en ‘Nothing burns like the cold’ (2017), también recurrieron al gran maestro del soul. Bueno, y Maverick Sabre en ‘Let me go’ (2011) y…

 
 

Daft Punk - ‘Harder, better, faster, stronger’ (2007)

 
 

Sample: ‘Cola Bottle Baby’, de Edwin Birdsong (1979)

Uno de los primeros éxitos de Daft Punk, ‘Harder, better, faster, stronger’, incluido en su disco ‘Discovery’ (2001), se basaba en un ‘sample’ de la canción funky ‘Cola bottle baby’, de Edwin Birdsong, también conocido por ser teclista de estudio y trabajar con estrellas como Stevie Wonder y, aunque sus discos tuvieron un éxito relativo, inspiró a numerosas bandas. El dúo francés añadió a la base de teclados unas voces robóticas consiguiendo crear ese sonido retro-futurista característico de su música.

 
 

Como ejemplo de cazador cazado, ‘Harder, better, faster, stronger’ fue a su vez ‘sampleada’ por Kanye West en ‘Stronger’, aunque el resultado final no es ni de lejos tan bueno como en el tema de Daft Punk.

 
 

Gorillaz - Clint Eastwood (2001)

 
 

Samples: ‘Rock 1’, del Omnichord OM-300 yEl bueno, el feo y el malo’, de Ennnio Morricone (1966)

Imagina que te compras un teclado, pruebas uno de esos sonidos preestablecidos o de la caja de ritmos y con ese riff creas una canción que se convierte en un gran éxito y en una de las mejores de este siglo. Pues algo así le sucedió a Damon Albarn con ‘Clint Eastwood’, tema con el que se dio a conocer al mundo la banda virtual Gorillaz en 2001. Ese ritmo jamaicano que es la base de toda la canción lo descubrió de forma milagrosa en un Omnichord OM-300, un teclado especial de la marca japonesa Suzuki de los años 80 que pretendía ser algo así como un sustituto electrónico para el arpa, al escuchar uno de los ritmos preestablecidos (llamado ‘Rock 1’) que incluía.

 
 

De hecho, Albarn siempre bromea con que lleva 20 años probando instrumentos electrónicos por si suena la flauta otra vez. El resto de la canción también incluye algunos ‘samples’ (esos gritos del principio) del tema principal de la película ‘El bueno, el feo y el malo’, protagonizada, cómo no, por Clint Eastwood, compuesto por Ennio Morricone.

Beck - Devil’s haircut (1996)

 
 

Samples: ‘Out of sight’, de Them (1966); ‘Soul drums’, de Bernard Purdie (1968), y ‘I can only give you everything’, de Them (1966)

El disco ‘Odelay’ (1996) de Beck, probablemente el mejor de su carrera, contiene una buena colección de ‘samples’, desde el saxofón que suena en ‘The new pollution’ (Joe Thomas, ‘Venus’) a la voz robótica de ‘Where it's at’ (que para los fans de ‘Futurama’, reproducía Bender en uno de los episodios de la serie en los que aparecía el cantante). Pero los más destacados son los de la canción ‘Devil’s haircut’, cuya batería se basa en dos temas, la versión de ‘Out of sight’ (James Brown) que hizo Them, ‘sampleada’ para el principio, y ‘Soul drums’, de Bernard Purdie (probablemente el batería más ‘sampleado’ en el hip hop, o eso dicen), para el estribillo.

 
 

Pero lo que ha convertido en himno al tema es el riff, que no es un ‘sample’ directo, sino que Beck decidió directamente tocar esas cuatro notas con la guitarra, para darles más potencia, y el bajo a lo largo de todo el tema. Se trata de la canción ‘I can only give you everything’ del grupo de rock de Belfast de los 60 y 70 Them, el que lanzó a Van Morrison, su cantante desde 1964 a 1966, a la fama. El tema ya era un clásico para los fans del garaje y el riff alcanzó un nuevo nivel gracias a Beck, que acompañó con esas letras tan bizarras marca de la casa que hablaban, supuestamente, sobre lo malo que es la vanidad.

Massive Attack - Teardrop (1998)

 
 

Sample: ‘Sometimes I Cry’, de Les McCann (1973)

‘Mezzanine’, de Massive Attack, es uno de los mejores discos de la historia por la variopinta mezcla de ‘samples’ que incluye, desde Isaac Hayes a Led Zeppelin y The Velvet Underground. Pero si hay uno que es básico para una canción, ese es el ‘loop’ de batería de ‘Teardrop’, que parece el latido de un corazón, sacado directamente de ‘Sometimes I Cry’, una pieza de jazz del pianista y vocalista americano Les McCann, y que sobresale durante los primeros 60 segundos hasta que Elizabeth Fraser, de Cocteau Twins, canta las primeras palabras y termina de darle ese carácter tan etéreo con su voz. En un principio se llegó a barajar el nombre de Madonna para colaborar en una canción que se hizo más popular al convertirse en la sintonía de la serie ‘House’, aunque solo en Estados Unidos.

 
 

Beyoncé feat. Jay-Z - Crazy in love (2003)

 
 

Sample: ‘Are you my woman (Tell me so)’, de The Chi-Lites (1970)

Si por algo es conocida ‘Crazy in love’ de Beyoncé es por ese inicio con los metales sonando a todo trapo que se repite a lo largo de la canción y que infunde una energía arrolladora. Se trata de un fragmento que pertenece al tema de The Chi-Lites de 1970 titulado ‘Are you my woman (Tell me so)’, que fue un éxito normalito en su época, pero que convertido en la base de ‘Crazy in love’ alcanzó el número uno en Estados Unidos y Reino Unido en 2003.

 
 

Se trata de una parte que el productor Rich Harrison ya tenía preparada antes de ofrecérsela a Beyoncé (y que bien podría haber acabado cantando otra). La artista no quedó del todo convencida la primera vez que escuchó esa «fanfarria estridente», porque pensaba que era algo demasiado retro y que ya nadie utilizaba ese sonido en el siglo XXI. Pero finalmente accedió y le dio dos horas al productor para que preparara una canción con esa base, que se completó con los añadidos que ella hizo (el uh-oh, uh-oh) y la parte del rapero Jay-Z para redondearla. El resultado final, uno de los clásicos de este siglo.

Gnarls Barkley - Crazy (2006) 

 
 

Sample: ‘Last men standing’ (‘Nel Cimitero Di Tucson’), de Gianfranco y Gian Piero Reverberi para ‘El clan de los ahorcados’ (1968)

Puestos a buscar un ‘sample’ para una canción de R&B y electrónica, la banda sonora de un spaghetti western no parece, ‘a priori’, la mejor fuente de inspiración, pero el productor Danger Mouse (The Black Keys, Gorillaz, Beck, U2, Adele y el que se atrevió a mezclar a Jay-Z con los Beatles en ‘The Grey Album’) demostró que sí que lo era con ‘Crazy’, un tema de sobra conocido de Gnarls Barkley (colaboración que hizo con el cantante Cee Lo Green), que lideró las listas de medio mundo (marcando el hito del ser el primer número uno puramente de internet, es decir, antes de salir publicado en formato físico) y que obtuvo un Grammy en 2007.

 
 

La canción usa diversos elementos (melodía principal de violín, coros…) de ‘Last men standing’, un tema compuesto por los hermanos Gianfranco y Gian Piero Reverberi, con claras influencias del maestro Ennio Morricone, que aparece en la película ‘El clan de los ahorcados’ (protagonizada por Django, ese personaje que luego inspiró a Tarantino años después) de 1968. 

The Verve - Bitter Sweet Symphony (1997)

 
 

Sample: ‘The Last Time’, versión de The Rolling Stones de The Andrew Oldham Orchestra (1965)

‘Bitter sweet symphony’, uno de los himnos del brit pop y elegida por medios como ‘NME’ y ‘Rolling Stone’ como la mejor canción de 1997, es la más rocambolesca de la lista en cuanto a derechos de autor. El tema utiliza un ‘sample’ de la versión orquestal que el productor Andrew Loog Oldham realizó de ‘The last time’, un tema de The Rolling Stones de 1965, que según la licencia que solicitó el grupo era de cinco notas, aunque el mánager de sus satánicas majestades, Allen Klein, poseía los derechos de las canciones anteriores a 1970 y demandó a The Verve en 1997 por usar más música de la pactada, y Andrew Loog Oldham hizo lo mismo dos años después.

 
 

La banda siempre argumentó que se limitó a utilizar el ‘sample’ de cinco notas (se escucha en la parte en el que entra la batería) y a añadir sobre él nuevos arreglos orquestales, pero finalmente llegó a un acuerdo fuera de los tribunales, ante la posibilidad de perder el caso (sonaba demasiado parecido todo a la versión de Andrew Loog Oldham), y accedió a incluir a Mick Jagger y Keith Richards como compositores del tema, y a entregar el 100% de los derechos a ABKCO Records, la compañía de Allen Klein. En resumen, que se quedaron sin la gallina de los huevos de oro.

Finalmente, en 2019, Richard Ashcroft, líder de The Verve, llegó a un acuerdo con Jagger y Richards para recuperar los derechos acabando con una disputa de 22 años en la que, por el camino, ha dejado de ingresar una buena cantidad de dinero.

Madonna - ‘Hung Up’ (2005)

 
 

Sample: ‘Gimme! Gimme! Gimme! (A Man After Midnight)’, de ABBA (1979)

La reina del pop usando un ‘sample’ de los dioses del pop. ¿Qué podía salir mal? Absolutamente nada. ‘Hung up’ se ha convertido en uno de los temas más conocidos de Madonna, y tiene unos cuantos, con el que volvió a coronarse como reina de la pista de baile en 2005, gracias a que usa los famosísimos sonidos a flauta electrónica del ‘Gimme! Gimme! Gimme! (A Man After Midight)’ de ABBA, compuesta por Benny Andersson y Björn Ulvaeus, a los que tuvo que pedir permiso a través de una carta para poder usarlos. Se trataba solo de la segunda vez que el grupo sueco accedía a la petición de otro artista para usar su música (los primeros fueron The Fugees con ‘The name of the game’).

 
 

Robbie Williams - Rock DJ (2000)

 
 

Samples: ‘It's ecstasy when you lay down next to me’, de Barry White (1977); ‘Can I kick it?’, de A Tribe Calle Quest (1990) y ‘La Di Da Di’ de Slick Rick y Doug E. Fresh (1985)

Famosa por la censura que sufrió el videoclip cuando Robbie Williams no solo se quitaba la ropa, sino hasta la piel, todo el ‘flow’ de la canción ‘Rock DJ’ se lo debe a ‘It's ecstasy when you lay down next to me’, de Barry White, cuyos compositores amenazaron al británico con querellarse tras escuchar el tema, pero que finalmente fueron incluidos en los créditos, quedándose con más de la mitad de los derechos (dale al ‘play’ y descubre por qué era totalmente justo). La letra de la canción también contiene referencias al ‘Can I kick it?’ de A Tribe Calle Quest y ‘La Di Da Di’ de Slick Rick y Doug E. Fresh.

 
 

Eminem - My Name Is (1999)

 
 

Sample: ‘I Got The…’, de Labi Siffre (1975)

Si bien ‘Stan’ era otra de las canciones de Eminem que podían figurar en la lista, el tema de Dido ‘Thank you’ no tiene ni la mitad de magia, y gracia, del ‘I got the…’ de Labi Siffre con el que Dr. Dre engendró ‘My name is’, que sirvió para que muchos descubrieran al rapero de Detroit y se introdujeran en el hip hop. El productor tomó como base el interludio musical de mitad del tema de Siffre, en el que destacaba el bajo y el teclado, y que se repite a lo largo de todo ‘My name is’ mientras Eminem presentaba a su alter ego Slim Shady, criticaba a su madre por drogarse (con demanda de ella al canto) y hacía chistes sobre las Spice Girls. Como curiosidad, Eminem tuvo que pasar por el aro y eliminar algunos comentarios homófobos de la letra para poder usar el ‘sample’, dado que Siffre es un activista gay y lo impuso como condición.

 
 

Lil Nas X - Old Town Road (2019)

 
 

Sample: ‘Ghosts IV - 34’, de Nine Inch Nails (2008)

Si alguien le hubiera dicho a Trent Reznor hace unos años que ganaría un Grammy y numerosos premios por un tema country-trap, probablemente le hubiera mandado a la mierda. Pero es lo que sucedió con ‘Old town road’ del rapero Lil Nas X. El autor original es YoungKio, un joven productor de los Países Bajos que vendía la parte instrumental del tema a través de la plataforma BeatStars, usando como base el banjo de la canción ‘34 Ghosts IV’ de Nine Inch Nails, aderezada con ‘beats’ típicos del trap. Lil Nas X se la compró a finales de 2018 por el módico precio de 30 dólares (a lo que hay que sumar que el disco de NIN tenía licencia de Creative Commons, es decir, era gratuita. ¡Menuda suerte tuvo!).

 
 

El tema, relanzado por el rapero con un giro hacia el country, se convirtió en viral a través de las redes sociales, lo que le valió para firmar con Universal y volver a publicarlo bajo el nuevo sello. Y dado que ‘Old town road’ fue eliminado de la lista de éxitos Billboard de country por ser, según argumentaron, poco afín al género, lo que despertó muchas críticas por considerar que había cierto racismo en la decisión al tratarse de un artista afroamericano, el rapero decidió hacer un remix con todo un icono de ese estilo, Billy Ray Cyrus, padre de Miley Cyrus, como réplica, colocando el tema 19 semanas seguidas en el número uno de la lista norteamericana. 

Jay-Z feat. Alicia Keys - Empire State of Mind

 
 

Sample: ‘Love on a Two-Way Street’, de The Moments (1969)

Jay-Z figuraría seguramente en el ‘top 3’ de la lista en cuanto a mayor uso de ‘samples’, junto a Kanye West y Dr. Dre, y uno de los más recordados es el que hace en ‘Empire State of mind’, junto a Alicia Keys, del tema ‘Love on a Two-Way Street’ de The Moments, aparte de homenajear en la letra la famosa ‘New York, New York’ de Frank Sinatra. Ese sencillo ‘loop’ de piano es el que hace diferente, y elegante, a la canción, aparte de la aportación de Keys, que fue una elección de las compositoras originales, Angela Hunte y Janet Sewell-Ulepic.

 
 

Fatboy Slim - ‘Praise You’ (1999)         

 
 

Samples: ‘Take yo' praise’, de Camille Yarbrough (1975) y ‘Balance & Rehearsal’, de JBL (1973)

Ah, ese mítico piano con el que arranca ‘Praise you’ de Fatboy Slim y esa voz, que bien podría ser Nina Simone, cantando «We've come a long long way together / Through the hard times and the good / I have to celebrate you baby / I have to praise you like I should», que se convirtió en un clásico en los conciertos de Kasabian. Y es que el señor Norman Cook es de los más listos a la hora de incluir música ajena en sus grandes éxitos, ya sea en ‘The Rockafeller Skank’, ‘Weapon of choice’ o ‘Right Here, Right Now’.

 
 
 
 

Pero ‘Praise you’, cuyo videoclip dirigió Spike Jonze, combina perfectamente en ese principio dos canciones distintas: los primeros versos de ‘Take yo' praise’ (1975), que canta Camille Yarbrough, con el piano de ‘Balance & Rehearsal’, un tema grabado por la compañía JBL en ‘Session’, una especie de guía sobre cómo grabar un disco (así de rebuscado es). Lo dicho, un tío muy listo.

Firestarter - The Prodigy (1996)

 
 

Samples: ‘S.O.S.’, de The Breeders (1993); ‘Close (To the Edit)’, de Art of Noise (1984) y ‘Devotion (The Voice of Paradise Mix)’, de Ten City (1989)      

‘Firestarter’ es la primera canción de The Prodigy que alcanzó el número uno en la lista del Reino Unido y en buena medida se debe a ese riff de guitarra con wah wah que aparece al principio, sacado de la canción ‘S. O. S.’ de The Breeders, el grupo icónico de los 90 de Kim Deal, exbajista de The Pixies. Sin duda, es el elemento diferenciador del tema (y mucho mejor que lo que suena en el original, que no es una copia exacta) y el más recordado (junto al vídeo en un túnel abandonado del metro de Londres), aunque no es el único prestado de otros artistas, ya que ese grito que se escucha a lo largo de la canción es de ‘Close (to the Edit)’, de Art of Noise, y la batería pertenece a un ‘remix’ del tema ‘Devotion’ de Ten City. ‘Firestarter’ iba a ser en un principio instrumental, pero por suerte Keith Flint insistió en añadir la parte vocal, algo sorprendente porque hasta entonces no había cantado en ninguna canción de la banda. Y lo bordó.

 
 

Britney Spears - Toxic (2003)       

 
 

Sample: ‘Tere Mere Beech Mein’, de Lata Mangeshkar y S. P. Balasubrahmanyam (1981)

Hubo una época ya lejana en la que Britney Spears era la mayor estrella de pop del mundo. Y lo fue porque su ejército de productores eran capaces de componer pepinazos como ‘Toxic’, originalmente ofrecido y rechazado por Kylie Minogue, y una de las canciones que más sonó en las radios en la década de los 2000, gracias a su estribillo pero, sobre todo, a ese toque pegadizo bollywoodiense que le daba un ‘sample’ que combinaba, magistralmente, dos fragmentos separados de ‘Tere mere beech mein’.

 
 

Se trata de un tema de Lata Mangeshkar y S. P. Balasubrahmanyam que aparecía en la banda sonora de la película de 1981 ‘Ek Duuje Ke Liye’, y que consiste en ese sonido de violín tan agudo que funciona como ‘hook’ del tema, es decir, lo que termina de llamar la atención del oyente e, irremediablemente, enganchar. En la introducción de ‘Toxic’ ya aparece el ‘sample’, mezclando una parte en un registro normal, que cambia de repente a una muy aguda, con ‘glissandos’. La combinación de esos sonidos ‘made in Bollywood’ con la guitarra surfera del tramo final termina de elevar la canción a exitazo de pop y con una calidad muy por encima de la media.   

The Chemical Brothers - Galvanize (2005)

 
 

Sample: ‘Hadi Kedba Bayna’, de Najat Aatabou (1995)

Los reyes de la pista de los 90 y principios de 2000 no podían faltar en este especial. Y de la larga lista de ‘samples’ con que a lo largo de su carrera nos han deleitado The Chemical Brothers, uno de los más originales es el mestizaje sonoro de ‘Galvanize’, con ese toque de música tradicional del norte de África (chaabi) de la canción ‘Hadi Kedba Bayna’ (muy popular en el mundo árabe y que trata en su letra sobre la infidelidad), de la marroquí Najat Aatabou, que encaja a la perfección con los versos que rapea Q-tip. Una mezcla exótica que les valió para ganar un Grammy y colocarse en el número uno de la lista de ventas española. Además, el videoclip se rodó en Málaga.